Llega el verano y, con él, toca lucir pies después de muchos meses escondidos bajo zapatos cerrados y botas. ¿Cómo podemos poner a punto esta parte de nuestro cuerpo?
Yo siempre recomiendo una sesión de pedicura justo antes de empezar a usar sandalias. Un profesional estético será siempre el que saque el mayor partido a nuestro cuerpo. Tanto si podemos realizarnos esta sesión como si lo hacemos en casa, el tratamiento consiste en lo siguiente:
En primer lugar, debemos cuidar nuestra piel a través de exfoliantes para eliminar las células muertas. La piedra pómez nos ayudará a eliminar las durezas de aquellas zonas de pie que más hayan sufrido durante los meses de frío. Aplicaremos este tratamiento de forma suave y aplicando un ligero masaje.
A continuación, usaremos una crema hidratante para conseguir que los pies tengan el mismo brillo que el resto del cuerpo aún habiendo estado ocultos durante el invierno. Una buena labor de depilación también es obligatoria.
Una vez tengamos el pie tratado, pasaremos a los dedos y uñas. Las cutículas siempre fuera pero no cortando sino empujando suavemente con un palito de naranja. Las uñas bien cortadas y limadas, en forma cuadrada y pintadas con un esmalte de uñas. Les daremos dos capas, una primera para fijar el color y una segunda para fortalecer.
Para las más discretas, podemos optar por uñas transparentes o color porcelana pero la tendencia es a utilizar colores vivos. Si nuestros pies están bien cuidados, podremos llevar casi cualquier color. Pero cuidado porque si descuidamos las uñas, por ejemplo, el resultado puede ser horroroso, incluso con tonos suaves.
No debemos olvidar que el pie quizá sea una de las partes del cuerpo que más sufre. Los tacones, los zapatos a veces no demasiado adecuados, hacen que tengamos problemas en los dedos y la estructura del pie que, además de ser muy dolorosos, son bastante antiestéticos. La podología es la especialidad médica que podrá darnos distintas soluciones a fascitis plantar o juanetes entre otros.
Nuestros pies ya estarían listos para un verano de infarto. Solo nos faltarían unas maravillosas sandalias para lucir pies este verano y marcar tendencia. ¡Pisa fuerte!