Los primeros looks inspiradores del otoño se caracterizan, sobre todo, por su sencillez. Hay de todo, para todas las temperaturas, que este tiempo es muy variable.
Pero, sobre todo, he intentado elegir looks fáciles de adaptar, que no imitar. ¿Quién no tiene una camisa vaquera en el armario? ¿Y un bolso marrón, aunque no sea de Louis Vuitton? Incluso el look más sofisticado a priori, está compuesto por prendas de Zara.
Con esto quiero demostrar que no hace falta mucho dinero para tener estilo. Para mi, es mucho más importante la creatividad. ¿no creéis? 🙂