Estamos en plena época de bodas y muchas veces nos preguntamos ¿qué regalar a los novios?
En este aspecto, influyen muchas variables, desde el grado de conocimiento de los contrayentes (no es lo mismo que sean familia a compañeros de trabajo, por ejemplo), el estilo de vida de la pareja (si son unos novios modernos o bien más tradicionales), hasta si se asiste o no al evento y cuántas personas asisten.
En realidad, lo más adecuado, desde el punto de vista del protocolo es el regalo físico, pero no vale cualquier regalo. Evitaremos regalar electrodomésticos si los novios no tienen una lista de bodas en la que aparecen estos objetos. Tampoco regalaremos algo muy personal si no formamos parte del círculo íntimo de los contrayentes.
Pero es cierto que regalar dinero es una costumbre cada vez más extendida. En principio, esta opción la dejaríamos para personas muy cercanas, salvo que los novios expresamente hayan solicitado a los invitados que les regalen dinero. Es cada vez más común que los novios, en la invitación de boda, incluyan un número de cuenta corriente donde hacer el ingreso del regalo. Aunque parece demasiado mercantilista, también debemos pensar que este dinero puede contribuir, por ejemplo, a pagar el viaje de novios o a amueblar una casa recién estrenada.
Y en el caso de dinero ¿cuánto damos? Hay una regla no escrita que dice que entregaremos, como mínimo, el coste del cubierto de cada uno de los invitados.
En ocasiones, los novios deciden donar los regalos a una buena causa. Habitualmente, solicitan dinero y comunican en la invitación dónde se destinará el dinero junto con la cuenta corriente en la que se depositará.
¿Y si no asistimos a la boda? ¿debemos regalar algo? Lo más correcto es que, aunque no podamos asistir, si recibimos una invitación de boda, debemos realizar un pequeño regalo. En este caso, un objeto físico o una experiencia son buenas opciones.
Aquí os dejo más ideas:
Experiencias especiales: Rusticae ofrece tarjetas regalo con estancias en hoteles con encanto. Los precios rondan entre los 300 € y los 500 € y los novios pueden disfrutar de escapadas románticas, cenas deluxes y mucha intimidad.
Obras de arte: aunque ya está en el plano más personal, podemos encontrar en las galerías pequeñas obras de arte para decorar una casa que, además, suponen una inversión para los novios. A partir de 300 € en webs como Artelista o galerías de arte especializadas, podemos comprar este tipo de objetos. Por ejemplo, este lienzo al oleo que os enseño es del artista belga Pol Ledent y se llama «Blue poppies in summer 4550».
Vino: una botella de vino es un opción excepcional, por ejemplo, para aquellas bodas a la que no podemos asistir pero para las que sí nos gustaría realizar un pequeño regalo a los novios. El vino es una industria ligada a una extensa y sólida cultura y su variedad de precios hace que sea asequible a casi cualquier bolsillo. En Lavinia, por ejemplo, encontramos gran diversidad de nombres, bodegas y zonas geográficas. Para un regalo, os recomiendo un vino de renombre y, si es posible, una Magnum (botella de 1,5 litros). En la imagen, vemos la prestigiosa bodega Pago de Carraovejas.
Personal Shopper: puede que los contrayentes estén demasiado ocupados para ir de compras, o que sean amantes del shopping, o quizá necesiten tener siempre su armario a punto para hacer frente a distintos compromisos. Un Personal Shopper es un profesional que mejora la imagen de sus clientes. Puede realizar desde estudios personalizados de imagen, con validez para toda la vida, hasta acompañar a los novios por una ruta de tiendas personalizada. Contratar los servicios de un Personal Shopper también puede ser un regalo original y divertido para los novios.
Si necesitáis más información sobre el servicio de Personal Shopper, o necesitáis inspiración sobre algún regalo que necesitéis hacer, podéis poneros en contacto conmigo a través de este formulario.
