Una de las principales preguntas que nos hacemos cuando estamos en un probador es ¿esta prenda me sienta bien?
La opinión de los acompañantes es muy válida, sobre todo si hay confianza, porque podrán deciros con sinceridad si realmente os sienta bien la prenda que os estáis probando. Pero es cierto que solo un asesor de imagen puede confirmaros, con objetividad, si esa prenda está hecha para vosotros.
Los asesores de imagen se fijan en los detalles para llegar a esa conclusión y hay una pequeña clave que no debemos perder de vista: las arrugas.
Y no me refiero a las arrugas que salen en algunas prendas, por ejemplo, el lino. O esas arrugas que tenemos cuando permanecemos sentados durante mucho tiempo, por ejemplo, durante un viaje en coche o en tren.
Me refiero más bien a las arrugas que nos salen cuando probamos la prenda sobre nuestro cuerpo. Y parece muy obvio pero no lo es tanto. ¿Cuántas veces hemos llevado camisas con arrugas en la parte del pecho? Eso ocurre porque no es nuestra talla de contorno. Los botones se estiran y, a veces, nos damos cuenta de que la camisa se nos ha abierto.
¿Y cuándo nos probamos una falda y, de repente, no saca una barriguita que no tenemos? Es el mismo caso, esas arrugas son síntoma de que la falda no es nuestra talla de cadera o de cintura.
Pero no solo nos encontramos arrugas cuando la prenda nos queda estrecha. ¿Y si nos arrastra el pantalón? Exactamente igual, esa prenda no nos queda bien.
La regla fundamental es que la prenda debe quedar como un guante sobre nuestro cuerpo, nunca debe costar ponérnosla, abrochar un botón o subir una cremallera.
En caso contrario, generaremos en la prenda un "estrés" por ajustarse a nuestro cuerpo que no es estético y además, a medio/largo plazo, la daña, por lo que nos durará mucho menos la prenda.
Una vez confirmado que la prenda nos sienta perfectamente, el siguiente paso es preguntarnos ¿esta prenda disimula lo que no me gusta de mi cuerpo? ¿potencia lo que quiero resaltar?
Para ayudaros, nuestro personal shopper selecciona semanalmente algunas prendas en función de los problemas más comunes que nos hemos encontrado con nuestros clientes. Os animo a que echéis un vistazo a nuestro armario.
¡Hasta el próximo post!