La etiqueta no solo marca el vestuario de eventos como las bodas o los funerales. También encontramos otros eventos como una graduación, por ser un día especial, requieren un vestuario concreto.
Si somos los protagonistas, el primer consejo que os damos es conocer bien el entorno. El grado de elitismo de la escuela o universidad marcará en cierto modo el material o la marca de las prendas que componen el look.
Para chicas siempre recomendamos vestidos cóctel con un largo bien dos centímetros por encima de la rodilla o dos centímetros por debajo. Nos debemos olvidar de escotes pronunciados. Por ejemplo, somos contrarios a llevar un palabra de honor en un evento de este tipo si no lo complementamos con una chaqueta o echarpe que tape los hombros.
En los últimos años se han puesto de moda los vestidos globo, que suelen ser muy juveniles ya por su forma y nos ayudan a dibujar la figura y disimular las caderas.
Si no nos vemos con falda, los monos son una opción idónea para vestir con elegancia más allá del clásico traje sastre.
Como estas ceremonias suelen celebrarse de día o tarde, para los complementos elegiremos un bolso pequeño tipo clutch sin pasarnos con la pedrería. Para el calzado, siempre que se pueda, tacón a través de unos salones y sandalias ya que nuestro look lucirá mucho mejor.
Y cuidado con los peinados aparatosos. Habitualmente, los graduados suelen ser jóvenes así que es mejor apostar por la frescura que por un recogido recargado. Pero, al tratarse de un evento especial, sí recomendamos ponernos en manos de un peluquero y, si es posible, maquillador profesional que nos pueda realizar un maquillaje social acorde a nuestras facciones.
En cuanto a los chicos, siempre recomendamos traje con camisa y corbata clásica. Evitaremos tonos demasiado estridentes y olvidaremos los tejidos metalizados. Mucha atención a los zapatos. Si no son nuevos, sí deben estar limpios y cuidados.
Si no somos los protagonistas sino los padres o familia cercana, seguiremos una misma línea. Para las mujeres, elegiremos el clásico traje sastre que nunca falla o un vestido cóctel muy discreto (nada de jeans ni escotes) y para los hombres traje con corbata.
Si no somos los protagonistas sino los padres o familia cercana, seguiremos una misma línea. Para las mujeres, elegiremos el clásico traje sastre que nunca falla, una combinación de pantalón y blusa o un vestido cóctel muy discreto (nada de jeans ni escotes) y para los hombres traje con corbata.
Podéis ver más prendas para una graduación en nuestro Personal Shopper online.
